De puerto en puerto
De Camposancos a A Guarda
Situación y entorno

A Guarda, integrada en el conjunto comarcal del Baixo Miño, tiene una extensión de 20,4 km.2, que agrupa a 10.200 habitantes, distribuidos en tres parroquias: Santa María de A Guarda, San Lorenzo de Salcidos y Santa Isabel de Camposancos.

A Guarda, es conocida no solo por su riqueza arqueológica, sino también por su belleza natural. Su situación privilegiada, vértice de mar, río y montaña, pone a disposición del visitante un gran abanico de fauna, flora y paisajes únicos, que se pueden disfrutar paseando por la senda litoral o desde el monte Santa Tecla.

Los núcleos de A Guarda, Salcidos y Camposancos, son lugares con una gran cantidad de atractivos turísticos, muchos de los cuales son merecedores por si mismos de una visita, por citar los más importantes, el Castro de Santa Tecla o el castillo de Santa Cruz son un claro ejemplo de lo antedicho.

Y mientras callejeamos por A Guarda, podemos realizar un recorrido por los puntos mas singulares del casco urbano y que no debemos dejar de visitar: La Plaza del Reló, la Torre del Reló, la Rúa Colón, El Muro, el Monasterio de las Benedictinas, el Monumento al Marinero Desaparecido, la Calle Malteses, el museo A Atalaia, la Iglesia de Santa María y finalmente las Casas Indianas.

Las fiestas, capítulo aparte, destacan por el carácter abierto de los guardeses, lo que invita a participar activamente al forastero. La más popular y conocida es la Festa do Monte en donde bandas, grupos de gaitas y trajes regionales llenan las calles de música y colorido.

Finalmente, tenemos que citar a otro de los grandes atractivos de A Guarda: su gastronomía. Basada principalmente en los productos del mar como mariscos y pescados de la costa, de primera calidad. A Festa da Langosta e Cociña Mariñeira ofrece lo mejor de la cocina guardesa.